No, no deberías aguantarte
Has intentado relajarte. Cambiar de posición. Ir más lento.
Pero aún así, duele.
Y aunque te digas “seguro es normal” o “ya se me pasará”, hay una parte de ti que se pregunta:
"¿Esto debería doler?"
Spoiler: no. No debería doler.
Y no estás exagerando si te duele. Tampoco estás sola.
En GyneVital vemos a muchas mujeres que han vivido el sexo desde la incomodidad, la culpa o el silencio, sin saber que ese dolor tiene nombre, causas y solución.
¿Qué es la dispareunia?
La dispareunia es el dolor genital persistente o recurrente que aparece antes, durante o después de una relación sexual.
Y no, no es solo “algo físico”:
Ese dolor puede ser una mezcla de factores físicos, hormonales, emocionales y hasta sociales.
Puede sentirse como:
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Ardor o picazón al inicio de la penetración
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Sensación de “tope” o presión interna
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Dolor agudo o punzante
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Irritación o sensibilidad prolongada después del sexo
Y lo más importante: no tienes que vivir con eso como si fuera normal.

¿De dónde viene ese dolor? (Y por qué nadie te lo explicó antes)
Existen muchas causas posibles. Algunas muy conocidas. Otras que nadie te dijo:
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Sequedad vaginal (por estrés, anticonceptivos, lactancia o menopausia)
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Infecciones vaginales o urinarias frecuentes
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Endometriosis o condiciones ginecológicas
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Tensión muscular en el suelo pélvico
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Traumas previos o experiencias sexuales no placenteras
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Ansiedad, miedo al dolor, o presión emocional durante el acto
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Falta de información sobre tu propio cuerpo
Muchas veces no es una sola causa. Es una historia que tu cuerpo está intentando contar.
¿Qué puedo hacer si me duele?
Primero: no normalices el dolor.
Tu cuerpo merece sentir placer, no incomodidad.
Luego, busca acompañamiento profesional.
En GyneVital, te escuchamos sin prisa, sin juicios y sin minimizar lo que sientes.
Algunas posibles rutas de cuidado pueden ser:
✅ Evaluación médica para descartar causas físicas o hormonales
✅ Terapia sexual o psicológica para trabajar emociones ligadas al dolor
✅ Ejercicios de suelo pélvico guiados por especialistas
✅ Cambiar el enfoque del placer: menos presión, más autoconexión
✅ Explorar lubricantes o tratamientos específicos para tu caso
El placer no debe doler
Si sientes dolor al tener relaciones, no eres frágil, ni fría, ni “difícil”.
Eres una mujer que merece vivir su sexualidad con plenitud, cuidado y libertad.
Si quieres explorar qué está pasando en tu cuerpo y empezar a sanar, agenda tu cita en GyneVital.
Aquí no te decimos “es normal”, te decimos: vamos a entenderlo juntas.
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